El pleno del Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes ha vivido este jueves uno de los momentos más tensos y surrealistas de los últimos años. La sesión, marcada por la asistencia a de un grupo de ciudadanos pertenecientes a la plataforma contra el ruido de los aviones, se desbordó en múltiples ocasiones con interrupciones, aplausos y enfrentamientos verbales con algunos portavoces políticos.

La polémica surgió durante la discusión de una moción presentada por Vecinos por Sanse, que proponía la creación de una mesa de trabajo para abordar el problema del ruido generado por las rutas aéreas sobre el municipio. El público, visiblemente molesto, interrumpió repetidamente el debate plenario, aplaudiendo las intervenciones que apoyaban sus demandas, como las del portavoz de Izquierda Independiente, Juan Torres, y lanzando insultos o gritos de desaprobación hacia otros concejales, entre ellos, Diego Domingo García, Miguel Martín Perdiguero y el exalcalde Narciso Romero. Este último ha sido acusado por parte de los manifestantes de haber alterado las rutas aéreas para su propio beneficio, lo que, según ellos, ha incrementado el ruido en la localidad.

A medida que avanzaba el debate, la tensión creció hasta el punto en que, tras la votación de la moción, el público abandonó sus asientos y se acercó a las mesas de los concejales, lo que obligó a la intervención pacífica del agente de policía presente en la sala. Justo en ese momento, el secretario del pleno le advirtió a la alcaldesa Lucía Fernández: «Es que es un delito, porque están interrumpiendo una sesión plenaria», subrayando la gravedad de la situación.

La alcaldesa, Lucía Fernández, y el concejal de seguridad, Carlos Bolarín, hicieron varios llamamientos al orden, pidiendo respeto y calma. A pesar de los esfuerzos de las autoridades para mantener el control, los asistentes continuaron lanzando acusaciones. Durante todo el debate de la moción se escucharon gritos de «mentirosos» y exigencias de «decir la verdad».

El enfrentamiento entre Juan Torres y Carlos Bolarín añadió otro momento de tensión, con el concejal de seguridad pidiendo «ya basta» y exigiendo respeto, lo que provocó una respuesta airada de Torres, quien alegó que estaba diciendo al público que se sentase.

La moción fue rechazada con los votos en contra de PP e Izquierda Independiente.

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